Tenemos un cargo electivo en un municipio. Llegamos. A pesar de las dificultades, a pesar de los traspiés. Sabemos que seremos –o somos- muy observadas.
Nos sentimos capaces, pero también solas, aisladas. Es bueno pensar que a lo largo y ancho de la Argentina hay otras mujeres en la misma situación. Pongámonos en contacto, intercambiemos experiencias y problemas. O por lo menos sepamos dónde están, pero también qué hacen las mujeres argentinas de los gobienos locales.Para leer el boletín completo, de abril, de Municipio Mujer, visite el sitio web de Manos Solidarias
Tenemos un cargo electivo en un municipio. Llegamos. A pesar de las dificultades, a pesar de los traspiés. Sabemos que seremos –o somos- muy observadas.
Nos sentimos capaces, pero también solas, aisladas. Es bueno pensar que a lo largo y ancho de la Argentina hay otras mujeres en la misma situación. Pongámonos en contacto, intercambiemos experiencias y problemas. O por lo menos sepamos dónde están, pero también qué hacen las mujeres argentinas de los gobienos locales.Para leer el boletín completo, de abril, de Municipio Mujer, visite el sitio web de Manos Solidarias