Venezuela. La violencia política contra las mujeres
Source: Resumen Latinoamericano
En el marco de la última semana de tensiones poselectorales la Marcha Mundial de las Mujeres, coordinación nacional de Venezuela sienta posición sobre los lamentables hechos de violencia que una vez más enlutan a la nación.
Lamentamos que pese a todos los intentos del Gobierno venezolano de tender espacios de diálogo y construcción colectiva del país soberano y en paz que queremos la mayoría de las y los venezolanos, el fascismo una vez más opta por la vía desestabilizadora y violenta.
Así como en las otras 30 elecciones anteriores, la oposición se niega a reconocer la victoria del pueblo revolucionario, la legitimidad de las instituciones electorales, el marco legislativo vigente y los mecanismos para dirimir las inconformidades con los resultados. Una vez más hacen llamados a la intervención extranjera y la fomentan haciendo alianzas con intereses de corporativismo internacional como con el magnate Elon Musk de X.
En esta oportunidad han ido un paso más allá y han pagado a grupos para que ataquen y siembren el caos en las zonas populares, muy especialmente en las zonas tradicionalmente chavistas, pretendiendo sostener así que el Gobierno venezolano no tiene pueblo que sostenga su revolución. Es así que pretende infringir daños no solo materiales, sino también simbólicos y a la subjetividad del pueblo.
Nosotras como militantes de la Marcha Mundial de las Mujeres hemos reflexionado mucho sobre cómo las guerras benefician a los poderes transnacionales y afectan de forma diferenciada a las mujeres. Como venezolanas tenemos huellas en nuestro cuerpo-alma-mente de lo que ha sido resistir la guerra económica, el bloqueo y las sanciones. Es profundamente triste tener que volver de nuevo a denunciar la violencia política a la que son sometidas nuestras compañeras, especialmente en las zonas populares. Dos militantes populares han sido sacadas de sus casas y asesinadas en la vía pública.
Lea aquí el artículo completo publicado por Resumen Latinoamericano el 20 de agosto de 2024.
Imagen por Resumen Latinoamericano
En el marco de la última semana de tensiones poselectorales la Marcha Mundial de las Mujeres, coordinación nacional de Venezuela sienta posición sobre los lamentables hechos de violencia que una vez más enlutan a la nación.
Lamentamos que pese a todos los intentos del Gobierno venezolano de tender espacios de diálogo y construcción colectiva del país soberano y en paz que queremos la mayoría de las y los venezolanos, el fascismo una vez más opta por la vía desestabilizadora y violenta.
Así como en las otras 30 elecciones anteriores, la oposición se niega a reconocer la victoria del pueblo revolucionario, la legitimidad de las instituciones electorales, el marco legislativo vigente y los mecanismos para dirimir las inconformidades con los resultados. Una vez más hacen llamados a la intervención extranjera y la fomentan haciendo alianzas con intereses de corporativismo internacional como con el magnate Elon Musk de X.
En esta oportunidad han ido un paso más allá y han pagado a grupos para que ataquen y siembren el caos en las zonas populares, muy especialmente en las zonas tradicionalmente chavistas, pretendiendo sostener así que el Gobierno venezolano no tiene pueblo que sostenga su revolución. Es así que pretende infringir daños no solo materiales, sino también simbólicos y a la subjetividad del pueblo.
Nosotras como militantes de la Marcha Mundial de las Mujeres hemos reflexionado mucho sobre cómo las guerras benefician a los poderes transnacionales y afectan de forma diferenciada a las mujeres. Como venezolanas tenemos huellas en nuestro cuerpo-alma-mente de lo que ha sido resistir la guerra económica, el bloqueo y las sanciones. Es profundamente triste tener que volver de nuevo a denunciar la violencia política a la que son sometidas nuestras compañeras, especialmente en las zonas populares. Dos militantes populares han sido sacadas de sus casas y asesinadas en la vía pública.
Lea aquí el artículo completo publicado por Resumen Latinoamericano el 20 de agosto de 2024.
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