La Sra. Anne-Marie Lizin es la primera mujer que preside el Senado belga. Antes de ocupar tal cargo, fue miembro del Parlamento Europeo y de la Cámara de Representantes de Bélgica. Con motivo de la inauguración de la reunión de comités parlamentarios sobre género, convocada por la IPU en The House of Parliaments, la Presidenta explicó la importancia que reviste el establecimiento de comités sobre cuestiones de género e hizo referencia a la manera en que la mujer lucha en pos de la paridad.

UIP : A pesar de su apretada agenda, usted vino a Ginebra antes de viajar a Washington...

Estaba especialmente interesada en este seminario. En la actualidad, 60 parlamentos poseen un comité sobre cuestiones de género. Ello implica que la mujer en el parlamento está procurando colaborar a fin de superar las diferentes entre los partidos políticos. Todos sabemos lo que significa la política local y que no es fácil superar las diferencias, pero es muy importante intentarlo y lograrlo. Existe una tendencia positiva hacia la creación de un mecanismo especial para alcanzar la equidad entre el hombre y la mujer o mejorar la situación femenina.

UIP : ¿Debiera aumentar la participación de los partidos políticos en esta cuestión?

Los partidos políticos son muy importantes. Debemos presionar para el cambio en los niveles local y parlamentario de manera que podamos demostrar que la mujer en la política está haciendo algo diferente. Al menos podemos compartir una postura común: que el hombre y la mujer son iguales. En estos comités, los legisladores y las legisladoras pueden abordar cuestiones como los cupos o la paridad. En Bélgica y Francia se está hablando actualmente sobre la paridad. En primer lugar se abordó la participación en listas de candidatos en todos los niveles de una elección. No fue fácil porque la paridad es una cuestión sensible en todo parlamento pero debe ser la meta de cada uno de nosotros. El punto crucial del problema es el poder en el seno del parlamento. Los parlamentos que desean ser poderosos pueden lograrlo, al menos inmediatamente después de una elección cuando se necesita una mayoría para formar un gobierno. Y las legisladoras que deseen desempeñar su función pueden hacerlo. Esta es la manera de cambiar la mentalidad en un país para el futuro.

UIP : ¿Por qué es importante aumentar el número de mujeres en el parlamento?

Porque ellas reflexionarán sobre la igualdad y propondrán leyes en tal sentido, lo cual es muy importante para el progreso de la sociedad. Las leyes sobre la violencia contra la mujer son una medida innovadora en los parlamentos. Dichas leyes sancionan la violencia contra la mujer e infunden la idea -dentro de las fuerzas policiales y el ministerio de justicia- de que la violencia intrafamiliar no puede quedar impune. Se trata de algo novedoso en Europa y en otros países. Otros ejemplos comprenden la lucha contra la mutilación genital femenina y la promoción de los derechos de la mujer extranjera en los países poderosos.

UIP : ¿Puede la tradición erigirse como una barrera para la habilitación de la mujer?

En algunos casos, la tradición subyace tras las dificultades enfrentadas y las justificaciones esgrimidas para diferenciar al hombre de la mujer. Con frecuencia, se emplea como una herramienta poderosa que justifica el debilitamiento de la posición femenina. En la actualidad, en el siglo XXI, ya no existe ningún hombre que no sepa que su esposa es su igual. Aún así algunos pretenden desconocerlo y para ello dicen que Dios dijo tal o cual cosa, citan un libro u otro o hacen referencia a alguna práctica u otra. En todas partes el hombre sabe que somos sus iguales y esas son tácticas dilatorias para postergar el momento en el que perderán parte de su poder.

UIP : ¿Necesitamos trabajar más de cerca con los dirigentes tradicionales y religiosos?

Sí. Todos necesitan concientizarse, como la clase dirigente tradicional, los dirigentes religiosos, los reyes y los líderes tradicionales. Debemos convencerlos de que sus niñas necesitan superar el analfabetismo. La función de las instituciones religiosas es importante porque hace cuatro siglos en Europa y en otras partes del mundo aún en la actualidad, las instituciones religiosas temían perder su dominación y capacidad de suministrar orientación -los cuales son elementos de las religiones reveladas, con lo cual no están sujetas a cuestionamientos a primera vista. Se nos debe permitir cuestionarlas sin dejar de respetar la opción a la que tiene derecho cada persona. La religión es una elección personal y no algo que debe imponerse.

UIP : En los países occidentales, la presencia de la mujer en cargos de poder ha sido prácticamente inexistente. Ello está cambiando en la actualidad con el ingreso a escena de Ségolène Royal, Nancy Pelosi, Hillary Clinton, Angela Merkel y usted. ¿Cómo explicaría ese cambio?

Sólo puedo hablar en lo que a mí concierne. Creo que las sociedades en las cuales la mayoría de los ciudadanos son mayores permiten a la mujer con experiencia acceder al poder. No se trata de jóvenes de 25 años que acceden al poder sino de mujeres con una larga trayectoria en la política y que saben lo que significa tomar decisiones en situaciones delicadas. Nancy Pelosi es un buen ejemplo. En la actualidad, algunas sociedades maduras permiten a la mujer asumir funciones políticas de liderazgo. 

Extracto de una entrevista publicada originalmente en la Unión Interparlamentaria, The World of Parliaments, número del 24 de diciembre de 2006, disponible en http://archive.ipu.org/news-e/24-4.htm